En muchas ocasiones los amantes del séptimo arte se encuentran preguntándose porque no se estrena en cines alguna de las obras que esperan. Esto ocurre mucho con películas asiáticas, independientes e incluso latinoamericanas.
De hecho en muchas ocasiones hay que agradecerle a la piratería el que podamos conocer las obras de otras regiones del mundo, dado que esta plataforma carece de restricciones de región e intermediarios. La respuesta para esta eterna pregunta tiene una raíz en el proceso de realización de cualquier audiovisual.
El cine es un proceso de creación el cual se divide en tres etapas de creación: preproducción, la cual consiste en planificación, escritura, estructuración, contratación, materia legal y planteamientos. Producción la cual consta de filmación del material tanto animado como actuado. Y por ultimo post producción la cual consiste en marketing, comercialización, difusión, distribución y presentación. Es en el segmento de distribución donde se generan los principales descuidos por parte de los realizadores, su función consiste en intermediar entre el productor y el exhibidor de la película. Estos dos entes pueden encontrarse distanciados por regiones, países, continentes y por esta razón surgieron en 1916 las distribuidoras, bajo dos estándares de comercio. En los casos de mercados muy distintos como lo es la industria oriental los choques culturales han frenado el interés de las empresas distribuidoras hasta hace pocos años.
Al tener un tercer ente en la comercialización de películas los precios de estas aumentan y a la vez el tiempo. Se requiere no solo de que el distribuidor lleve la película a las cadenas de cine, sino también que revise el doblaje o subtitulado de la misma. Así surge el primer conflicto que afecta el factor de tiempo, dado que si una película se estrena en español y se quiere vender en el mercado norteamericano se debe doblar el lenguaje que llevara remasterizar la pista de audio y conlleva a un retraso en su estreno. Nuevamente es gracias a la piratería que las empresas distribuidoras tomaron medidas de estrenar películas de manera global o con poco tiempo entre sus estrenos de países dado que cada día hora que pasa pierden posibles entradas. El surgimiento de grupos de fansubs ha promocionado la difusión de películas que jamás verían la luz en un circuito comercial, solo se veían estas películas en festivales y hogares particulares.
Poniendo los pies en la tierra hay que mencionar que el mercado comercial de una película requiere de mucho capital, para poder costear la difusión hay que trabajar el marketing y la distribución cosa que en muchas obras se prefiere dejar pasar, y recién ahora gracias a las plataformas de almacenamiento digital se está explotando de manera abrumadora. Los canales especializados de descarga o streaming han promocionado la apertura cultural. El ahorro que las películas modernas (de distribución digital) conlleva en comparación con las películas en celuloide (método usado en el mundo hasta el 2010) un ahorro significativo considerando que solo un segundo de celuloide tiene un valor aproximado de 16 dólares.
Pero ¿Por qué las películas asiáticas, independientes, europeas y latinas no se comercializan como las industrializadas? Como mencione anteriormente el costo de contratación de una distribuidora es alto, existen muchas probabilidades de fracaso en taquilla por lo que a las cadenas de cines les interesa poco apostar por estas películas. Sin embargo existen empresas que vieron en estas obras un nicho de mercado fuerte y de alta calidad. En 1984 Tartan Films una sub empresa surgida de Palisades Media Group es cofundada entre Gran Bretaña y Norteamérica, esta empresa se dedica exclusivamente a la difusión, distribución y venta de películas difíciles de conseguir, traducirlas, subtitularlas y en algunos casos exhibirlas. Así fue como nacieron sus ramas Asian Xtreme, Spotlight, Tartan Terror y Tartan Films, las cuales trajeron las películas orientales a occidente. Así fue como varios estudios tomaron conciencia de este posible mercado y buscaron obras maestras que presentar en pantalla, como ocurrió con Sony Pictures en el 2000 cuando estreno en pantallas comerciales The Crouching Tiger, Hidden Dragon, siendo un éxito comercial y despertó interés por este tipo de cine en el publico general. Hay que recordar que DreamWorks estreno recién en el 2002 el remake de Ringu (1998) que llego a el formato comercial recién un año después del estreno del remake.
Con el mundo de la animación ocurre un caso parecido, solo que los distribuidores aparte de la comercialización y traducción de estas obras también cumplen funciones de censores de las obras. Mucha gente se pregunta porque en Sailor Moon los géneros de una pareja de personajes están cambiados, o porque uno de los enemigos de la primera saga tiene figura femenina cuando es hombre. Y la respuesta es que la casa distribuidora para Latinoamérica considero que ese material era inapropiado para la juventud que ve esa obra, por lo que se cambio y trataron de cortar las escenas más reveladoras al respecto. Como este caso hay mucho mas en cuanto al mercado latino, pero en sus versiones en inglés o español se respeta o cambian otras características.
La principal casa distribuidora de anime comercial en el mercado es Funimation la cual posee los derechos de una gran cantidad de animes y procura comercializar para el mercado de habla inglesa y subtitular en inglés, francés, español como también es la dueña de una parte de la plataforma digital HULU donde presenta su material. Para Latinoamérica existían dos vertientes ADV (actual adquisición de Funimation) que tiene doblaje mexicano y MANGA Films que se encarga del anime y el cine asiático en el mercado español. Este último ha sido el responsable de la gran oleada del anime de finales de los años noventas que muchos recordaran gracias a Mazinger Z, Neon Genesis Evangelion. Hay que mencionar a la vez a ZIV International quien fue la distribuidora encargada de introducir los “dibujitos japoneses” en los años ochenta con las series recopiladas en el Festival de los Robots, con doblaje Chileno.
Existen muchos detalles que quedan al margen de este compendio pero comenzamos poco a poco a desentrañar el cine de atrás para adelante para ir conociendo más de su desarrollo y cómo funciona la industria detrás de la gran máquina de los sueños.
Por Guillermo