Asus habría sido la responsable del costo de 1.000 dólares que ha causado polémica entre los fans.
Microsoft enfrenta nuevas críticas tras el anuncio del ROG Xbox Ally X, cuyo elevado precio de 1.000 dólares ha generado descontento entre los jugadores. Muchos consideran que el rendimiento del dispositivo no justifica su costo, lo que se suma al creciente malestar por las recientes decisiones de la compañía, como el aumento en las tarifas de Xbox Game Pass y la confusión sobre el futuro de sus consolas.
En una entrevista con Variety, Sarah Bond, presidenta de Xbox, aclaró que fue Asus quien determinó el precio final del Ally X, ya que el dispositivo pertenece completamente a su línea de hardware. Según Bond, el valor refleja las características y el diseño pensados por Asus, y afirmó sentirse satisfecha con la propuesta de valor que ofrecen a los jugadores. También destacó que las preventas agotadas respaldan la percepción positiva del producto, aunque reconoció que solo las ventas finales confirmarán su éxito.
A pesar de las declaraciones, la incertidumbre persiste dentro de la comunidad. Xbox ha dado señales contradictorias sobre su estrategia, alternando entre enfocarse en el hardware y priorizar sus servicios digitales. Si las ventas del ROG Xbox Ally X no cumplen las expectativas, no se descarta que el precio pueda ajustarse en el futuro.
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