El esperado cierre de la trilogía sigue avanzando con fluidez y no será exclusivo de la próxima generación.
El desarrollo de la tercera entrega de Final Fantasy VII Remake, aún sin título oficial, lleva nueve meses en proceso, según confirmó el director Naoki Hamaguchi. “Comenzamos a trabajar en ella inmediatamente después de finalizar Final Fantasy VII Rebirth, alrededor de marzo o abril de 2024. Nuestro objetivo fue solidificar la experiencia de juego que buscábamos, y logramos construir una versión alineada con la visión del equipo”, explicó Hamaguchi, quien también aseguró que “el desarrollo avanza según el cronograma”.
El productor Yoshinori Kitase destacó la importancia de una historia definida antes de avanzar en proyectos de esta magnitud. “Para la tercera entrega, pedí al escritor Kazushige Nojima que diera al escenario un mayor sentido de completitud, ya que es el juego final. Terminamos ese trabajo hace unos días, y siento que las cosas están avanzando sin problemas”, declaró Kitase.
Sobre la disponibilidad del juego, Kitase descartó rumores de exclusividad para la próxima generación de consolas. “No, no se preocupen por eso esta vez”, comentó con humor. Hamaguchi reafirmó el compromiso de Square Enix con un enfoque multiplataforma: “Queremos que nuestros juegos sean disfrutados por la mayor cantidad de personas posible, y aunque no puedo prometer nada, haremos todo lo posible para lograrlo”.
Con el lanzamiento de Final Fantasy VII Rebirth en PC a través de Steam y Epic Games Store, la estrategia de Square Enix de expandirse más allá de PlayStation se hace evidente. Hamaguchi explicó que, aunque la relación con Sony Interactive Entertainment sigue siendo fuerte, “ya no estamos en una época donde limitar el hardware ofrece beneficios sustanciales”. Esta filosofía apunta a futuros lanzamientos simultáneos en consola y PC, marcando un cambio clave en su estrategia.
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