El enfoque ahora está en experiencias innovadoras y contenido atractivo.
Seamus Blackley, uno de los diseñadores originales del Xbox, afirmó que la potencia de procesamiento ya no es un punto de venta crucial para las consolas modernas. En una entrevista con Videogamer, Blackley explicó que aunque el enfoque en la potencia fue clave para el éxito del Xbox original en 2001, hoy en día las consolas necesitan ofrecer experiencias únicas y contenido atractivo para destacar en el mercado.
Blackley recordó que en su momento, el Xbox original apostó por ser la consola más poderosa para competir con el hardware japonés y aprovechar juegos como Halo: Combat Evolved y Fable. Sin embargo, admitió que si hubiera seguido en Microsoft, no habría continuado con la estrategia centrada en la potencia. Según él, el atractivo gráfico ha llegado a un punto de saturación, y la emoción ahora radica en la jugabilidad innovadora.
Como ejemplo, Blackley señaló el éxito del Nintendo Switch, destacando su portabilidad y títulos cautivadores como The Legend of Zelda: Breath of the Wild. Tanto Sony como Microsoft han tomado nota de esta estrategia y, según informes, están desarrollando sus propias consolas portátiles. La industria parece estar alejándose de las especificaciones técnicas para centrarse en ofrecer experiencias de juego únicas y memorables.
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