La compañía apuesta por reinventar mecánicas dentro de sus sagas más queridas.
Nintendo no necesita crear nuevas franquicias, asegura el exprogramador Ken Watanabe, quien explicó que la compañía suele enfocarse primero en las mecánicas de juego y luego elige qué serie existente se adapta mejor. Con un catálogo tan amplio y popular, resulta más práctico introducir ideas frescas en marcas ya establecidas como Mario, Pikmin o Fire Emblem, en lugar de construir universos desde cero.
Watanabe, que trabajó en títulos como Super Mario Bros. Wii, Pikmin 3 y el propio Splatoon —considerado el último gran éxito original de Nintendo pese a cumplir ya una década—, comentó que la compañía “no se preocupa demasiado por la envoltura” mientras la jugabilidad innove. Así, nuevos proyectos pueden transformarse fácilmente en expansiones o spin-offs de sagas conocidas, garantizando reconocimiento inmediato y una base de jugadores lista para recibirlos.
Un ejemplo es Splatoon Raiders, próximo spin-off que apunta a un enfoque más narrativo y de aventuras, y que bien pudo haber sido una IP inédita. Sin embargo, al vincularlo a la popular franquicia de los inklings, Nintendo asegura tracción inmediata. Aun así, la compañía no descarta los proyectos originales: recientemente lanzó Drag x Drive, un juego de baloncesto en silla de ruedas que aprovecha los controles de movimiento de Switch 2, demostrando que aún hay espacio para nuevas ideas cuando no encajan en sus sagas clásicas.
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